En un comunicado, los protestants se muestran "perplejos" porque se beatifique a un Papa que, en su día, se opuso a la libertad de opinión, de prensa y de religión -entre otras- y que, según denunciaron, "fomentó la separación entre católicos y protestantes".

Por el contrario, FEREDE si entiende la beatificación del Papa Juan XXIII, del que aseguran que supuso "un hito positivo en el acercamiento entre católicos y protestantes" y, por ello, es la figura más querida del protestantismo, que le considera como "el Papa bueno".

En gneral, los protestantes no ven con buenos ojos los procesos de beatificación, que no existen en su Iglesia, al considerar que todos los cristianos son iguales.