La norma introduce nuevos tipos de instalaciones, además de las tradicionales, como las de establecimientos grícolas y hortícolas, las de automatización, gestión técnica de la energía y seguridad para viviendas, o las de piscinas, donde se introducen las tensiones que proporcionan seguridad intrínseca.

Otra de las novedades del reglamento es que aumenta el número mínimo de circuitos en viviendas, lo que aumentará el confort de las mismas.

Por primera vez en un reglamento de este tipo, se exige la entrega al titular de una instalación de una documentación donde se reflejen sus características fundamentaes, trazado, instrucciones y precauciones de uso.

"Carecía de sentido no proceder de esta manera con una instalación de un inmueble, mientras se proporciona sistemáticamente un libro de instrucciones con cualquier aparato eléctrico de escaso valor económico", señala el Real Decreto 842/2002, de 2 de agosto, sobre el reglamento.

Asimismo, se encarga al Ministerio de Ciencia y Tecnología que elabore una guía para ayudar a los distintos agentes afectados a una mejor comprensión de las prescripcionesreglamentarias.