Los cincuenta vecinos de la zona residencial Pirineos, donde está ubicado "El Dragón", vienen denunciando desde hace ocho meses los humos, olores y grasas que tienen que soportar a causa de las deficientes instalaciones del restaurante.

Ante la pasividad del Ayuntamiento para solucionar esta situación, los vecinos decidieron esta semana colocar pancartas en la fachada del edificio, en las que acusan a la corporación municipal de ineficacia y piden que les escuche y que se blige al propietario del local a cumplir la normativa.

La portavoz vecinal, Eleuteria Ginés, manifestó a Servimedia que teme que las basuras amontonadas en la puerta del edificio generen la aparición de ratas u otros focos de infección.

Asimismo, aseguró que los vecinos sólo piden que se arregle la situación, que "no nos molesten y que, al menos, podamos salir a las terrazas sin temor a resbalar por la grasa, que ya ha llegado a los pisos más altos".

Los vecinos denuncian además que las chimneas no cumplen las distancias que establecen las ordenanzas, que no existe sistema de ventilación de humos ni de insonorización y que el propietario del restaurante ha abierto una ventana sin permiso municipal.

A pesar de las 30 denuncias formuladas en los juzgados, la Agencia de Medio Ambiente de la CAM y el Ayuntamiento, el problema continúa, según los vecinos, y es probable que en los próximos días se produzcan concentraciones de los afectados en la puerta del local.

Mientras la Policía Localde Pozuelo confirmó a esta agencia que tiene que obligar a los propietarios del local a apartar las basuras de las puertas, los responsables municipales señalaron que se está llevando a cabo una inspección y que hasta el momento no se ha detectado ninguna anomalía en el cumplimiento de las ordenanzas.