El artífice de este programa, imothy Nugent, vio cómo clausuraban el campus de Galesburg un año después del inicio del programa y buscó otras soluciones para los discapacitados. Se dirigió a otras muchas universidades y centros con la esperanza de que su programa y sus estudiantes fueran aceptados, pero no tuvo suerte.

En consecuencia, Nugent y sus estudiantes decidieron manifestarse por todo el estado de Illinois apelando a la justicia y montando rampas de madera para mostrar a todo el mundo lo fácil que sería facilitar el accesode las sillas de ruedas en edificios universitarios.

Finalmente, Nugent lograría que el campus de Urbana-Champaign aceptara su programa con carácter "experimental". La condición era limitar el número de estudiantes discapacitados a 15 en cada curso académico. Durante ocho años, el programa siguió siendo considerado experimental y Nugent tuvo que buscar otras formas de financiación fuera del campus, hasta que terminó siendo aceptado.