La bonanza económica y la confianza de los ciudadanos siguen reflejándose en el comportamiento de las empresas. Así, los bienes de consumo egistran un aumento de producción hasta septiembre del 6,3%, los bienes de equipo -que muestran la confianza en la demanda a la hora de invertir en nuevos bienes de producción- han crecido un 9,8% y los bienes intermedios han subido un 5,1%.

Entre las actividades que están registrando más incremento de producción figura la de construcción de máquinas de oficina y ordenadores, con un 15,6%, y la producción de automóviles, con un 13,8%.

Las industrias más regresivas en su producción son la de constucción naval, que ha descendido un 14%, y la de extracción y preparación de combustibles sólidos (carbón) y coquerías, que retrocede un 5,5%.