El tribunal condenaal padre a siete años de prisión por agredir sexualmente a su hijo de cuatro años. Sin embargo, entiende que las peculiares circunstancias del caso, el gran afecto que el menor tiene a su padre, y el deseo de la familia de permanecer unidos, haría que la aplicación de la pena afectara negativamente tanto al menor como a la familia.

El presidente de Prodeni, José Luis Calvo, declaró a Servimedia que "si es mejor para el propio niño y para la familia y si hay garantías de que aquello no es producto de ua actitud reiterada de un enfermo, yo creo que en este caso la sala ha actuado bien, porque lo que se está persiguiendo es una finalidad en beneficio del niño y del entorno familiar".

Calvo quiso dejar bien claro que su argumentación se basa siempre en el hecho de que la petición de indulto esté avalada por dictámenes o estudios favorables de expertos, psicólogos o trabajadores sociales.

En este contexto, consideró que el hecho de internar al padre en la cárcel conseguiría no sólo que el padre cupliera una pena sino que se castigara a la familia. "Sería romper ese futuro que, según la sentencia, está garantizado si se concede el indulto".

El presidente de Prodeni entiende que en la decisión del juez ha pesado más el hecho de que no se trata de un pederasta sino de un hecho único no repetido que ha producido un trauma psicológico y familiar más por los efectos que por lo sucedido en sí.

Asimismo, argumentó que en España la finalidad de la justicia no es el castigo sino la reinserción "y pecisamente con esa finalidad creo que está bien pensado".