Si las Cortes aprobasen dicha reforma, una vez estudiado por el Consejo de Estado y l CGPJ, se penalizarían las relaciones sexuales con jóvenes de hasta 15 años (actualmente el límite de edad es de 12), sustituiría el actual sistema de multas por cárcel, se recuperaría la figura delictiva del proxeneta y se endurecerían las penas por elaborar, distribuir o consumir pronografía infantil.

Para Calvo, este proyecto de reforma atiende la demanda que la sociedad española hace sobre los delitos sexuales contra los menores. Aunque reconoció que "más vale tarde que nunca", el portavoz de Proeni lamentó, no obstante, que los trámites parlamentarios sean "tan lentos" a la hora de sacar adelante una ley una modificación de la misma.

Calvo agregó que cuanto más se demore la reforma del Código Penal, más víctimas infantiles verán cómo los culpables escapan de la justicia debida. Además, señaló que la aprobación de dicha modiciación acercará a España a otros países europeos, como Francia, Italia e Inglaterra, en materia de delitos sexuales.