Durante su alocución, realizada en catalán, el heredero de la Corona deseó prosperidad al pueblo catalán y expresó su deseo de que las 40 obras del escultor Santiago de Santiago expuestas en los jardines sean "motivo para dignficar a la ciudad".

Antes de inaugurar este museo al aire libre, el Príncipe de Asturias visitó la Universidad y la catedral, donde fue recibido por el obispo, Luis Martínez Sistach. Finalmente, asistió a un almuerzo en el parador de Tortosa y por la tarde regresó a Madrid.

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y el delegado del Gobierno en Cataluña, Frances Martí Jusmet, acompañaron al Príncipe durante el acto.

Tras la apertura oficial del parque, situado en las murallas de la ciuda, donde estuvo un balneario, Pujol agradeció públicamente a don Felipe de Borbón esta visita, que ha estado precedida por la polémica.

El secretario general de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Angel Colom, manifestó ayer que apoyaba la protesta de su partido contra esta visita. Justificó su rechazo en "la tradicional beligerancia de la dinastía de los Borbones contra Cataluña".

La semana pasada, ERC manifestó que no realizaría ningún boicot, pese a estar en contra de la visita de Felipe d Borbón a Tarragona.

Por su parte, Josep Guía, dirigente de la organización independentista Catalunya Lliure, también expresó su rechazo por la presencia del Príncipe, al que calificó de persona "non grata".

El líder independentista señaló sin embargo que sólo lanzarían octavillas, debido a las fuertes medidas de seguridad que rodearían al Príncipe.

Ante estas manifestaciones, Vicent Beger, alcalde de Tortosa, hizo un llamamiento a la ciudad para que don Felipe tuviese una acogida multitudinria. El ayuntamiento decidió en un pleno, por unanimidad, denominar "Jardines del Príncipe" al museo al aire libre inaugurado hoy.