En una rueda de prensa celebrada en el Congreso, Gimeno juzgó "un ejercicio de hipocresía y de travestismo político" que el Gobierno califique de "progresistas" las cuentas para el próximo año, cuando están respaldadas por la patronal y criticadas por los sindicatos.

Además, criticó que el Ejecutivo trate de "imponer su interpretación del Pacto de Tledo" antes, incluso, de que comience a trabajar la Comisión de seguimiento y evaluación.

Para argumentar sus afirmaciones, Gimeno subrayó que los Presupuestos Generales del Estado para el 2000 sólo destinan 16.000 millones de pesetas a financiar los complementos de mínimos y 45.000 millones al INEM, lo que significa que las cotizaciones sociales están contribuyendo a fianciar estas partidas.

Por todo ello, insistió en que el Ejecutivo está incumpliendo las recomendaciones del Pacto de Toledo, a esar de lo cual, garantizó que los socialistas acudirán a las reuniones de la Comisión de seguimiento.