Las organizaciones convocantes, que calificaron de "éxito rotundo" este primer acto de protesta, presentaron un escrito en el Congreso de los Diputados en el que reclaman a los diputados que no aprueben la congelación salarial en los Presupuestos Generales del Estado.

En el documento, los representantes sindicales dicen, ntre otras cosas, que la medida del Gobierno "supone un atentado gravísimo contra el derecho a la negociación colectiva" y que el proyecto de ley es "injusto porque supone ahondar en la pérdida de poder adquisitivo del personal de los servicios públicos".

Los delegados sindicales esperan que antes de convocar a los trabajadores a las manifestaciones previstas para el próximo 15 de octubre, el Gobierno abra la negociación. Las centrales cifran en un 11,2 por ciento el poder adquisitivo que perderían lo funcionarios en los últimos cinco años si no suben sus retribuciones el año que viene.