Sin embargo, estos dos diputados, cuyo voto necesita el PP para alcanzar la mayoría absoluta, han rechazado cualquier protagonismo en la negociación de los Presupuestos regionales para 1997, al entender que deben ser los dos grupos mayoritarios de la oposición (PSOE e IU) quienes tienen que apoyar o rechazar el anteproyecto diseñado por los populares.

El grupo popular, que gobierna en minoría en la Cámara asturiana, ha establecido ya los primeros contacts con los grupos de la oposición para tratar de consensuar un proyecto presupuestario que prevé un montante total de en torno a 150.000 millones de pesetas.

Sánchez Vicente dijo a Servimedia que los componentes del grupo mixto "no queremos entrar en una negociación tripartita o tetrapartita, sino que quienes deben negociar son IU y PSOE, ya que después de que hemos puesto un plus de responsabilidad apoyando los presupuestos del 96 desearíamos que fuesen otros los que cargasen ahora con ella".

En érminos similares se expresó Antón Saavedra, que afirmó que "no pienso ir a ninguna reunión para salir en la foto. Cuando presenten los presupuestos decidiré, aunque quienes deben negociar son los grupos mayoritarios".

Los presupuestos de 1996 fueron aprobados el pasado mes de abril tras una prórroga presupuestaria obligada por el rechazo frontal que PSOE e IU realizaron al proyecto del Gobierno de Sergio Marqués, que suponía un montante de 142.000 millones de pesetas y que tan sólo contaba con el apoo del asturianista.

La decisión del hasta entonces diputado de IU Antón Saavedra de abandonar la coalición pasarse al grupo mixto -al no sentirse respaldado por la dirección del partido en relación a unas declaraciones contra los sindicatos mineros-, supuso un vuelco en la situación al apoyar el proyecto "por propia responsabilidad, ya que Asturias necesitaba unos presupuestos", explicó el propio Saavedra.