Palmou concluyó su intervención ante un millar de militantes y simpatizantes del PP de Galicia con el mensaje claro de que la "única razón que inspiró, inspira e inspirará" su trabajo ha sido servir al presidente de la Xunta y del Partido Popular en esta comunidad.

Asimismo, se puso " disposición" del PP de Galicia y de la dirección nacional del partido para trabajar "al margen de cualquier interés personal" que él pueda tener. Palmou quiso desechar así las acusaciones de otros dirigentes de la formación, que le sitúan al frente de una conspiración para forzar la dimisión de Cuiña.

Palmou elogió hoy, uno por uno, a los principales dirigentes nacionales del partido por su actuación en la crisis del "Prestige": desde Aznar hasta Fraga, desde Arenas a Rajoy. Ensalzó la "brillante" acuación del vicepresidente primero del Gobierno; aseguró que el consejero gallego de Pesca, Enrique López Veiga, estuvo desde el primer momento "en la primera línea"; agradeció al ministro de Administraciones Públicas, Javier Arenas, que haya estado "diariamente en contacto" con el PP de Galicia; y destacó la "extraordinaria respuesta" de Fraga y Aznar.

Palmou acusó a la oposición de utilizar la crisis del "Prestige" con "fines políticos partidarios" mientras que el Gobierno destina a Galicia la "mayorinversión pública de la historia" con más de 12.000 millones de euros, de los cuales 5.207 suponen una inversión nueva.

El secretario general del PP de Galicia apuntó incluso que el Estado ha "saldado su deuda histórica" con esta comunidad con el Plan aprobado el viernes por el Consejo de Ministros en el Ayuntamiento de La Coruña.