En la denuncia se pide tamién a la Fiscalía que investigue los posibles delitos cometidos por las empresas que fletaron el petrolero, las que intervinieron en el fallido intento de salvamento y los responsables políticos encargados de gestionar la crisis.

El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, indicó que esta denuncia "tiene que ver con la negativa del Gobierno a decir la verdad, a abrir una comisión de investigación en el Parlamento y a permitir la participación de los parlamentarios".

"Cerradas esas puertas", ontinuó, "el intento del Gobierno de meter chapapote debajo de la alfombra tiene que ser respondido por la oposición tirando de la manta", lo que, en su opinión, comprende iniciativas parlamentarias y judiciales, así como movilizaciones ciudadanas.

"Queremos que esta denuncia contribuya a esclarecer los intereses económicos que han estado en el trasfondo del mareo del barco a lo largo de un periodo muy largo, que ha extendido la catástrofe, y esos intereses económicos tienen que aparecer para que respndan civilmente y penalmente de los daños provocados", dijo.

Finalmente, indicó que las actuaciones de Cascos y Matas "no solamente son censurables políticamente, sino que son posibles delitos ecológicos", y señaló que la responsabilidad política llega hasta el conjunto del Gobierno y su presidente, porque "si el señor Aznar no pide responsabilidades a sus ministros, se hace el máximo responsable de este desastre ecológico".