La escultura, situada en el muelle de la Sal, junto al puente de Triana, es una aportación que la asociación judía en España Sefarad'92 ofrece a Sevilla, con motivo de la celebración de la Exposición Universal.

El utor de la obra expresó durante el acto su deseo de que "con la idea de esta escultura, los pueblos judío, cristiano y árabe, que vivieron juntos tanto tiempo en Andalucía, vuelvan a darse la mano en el 92".

El presidente israelí recibió también las llaves de la capital andaluza de manos de su alcalde, Alejandro Rojas Marcos, en una ceremonia que discurrió en el salón de embajadores de los Reales Alcázares.

El galardón es una réplica exacta de la llave hebrea del siglo XIII que se conserva en el esoro de la catedral, junto con otra árabe que, según la tradición, fueron entregadas al rey Fernando III de Castilla cuando conquistó la ciudad para los cristianos, en 1248.

Herzog pemanecerá en Sevilla durante unos días más y mañana, jueves, tiene previsto visitar la isla de la Cartuja, sede de la muestra universal, a la que acudirá para supervisar la marcha de las obras de construcción del pabellón israelí.