EL PRESIDENTE DE LA FEB PIDE AL GOBIERNO QUE "NO LE TIEMBLE EL PULSO" PARA ENDURECER LA LEY DEL DEPORTE
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El presidente de la Federación Española de Baloncesto, José Luis Sáez Regalado, pidió hoy al secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, y al presidente de la Comisión Antiviolencia, Rafael Blanco, que "no les tiemble el pulso" a la hora de endurecer la Ley del Deporte y tomar medidas para erradicar las actitudes racistas y xenófobas que se producen en los espectáculos deportivos.
Según dijo, "me consta" que ambos mandatarios están preocupados por estos hechos y "van a ser implacables" a la hora de adoptar medidas para acabar con esta lacra en el deporte español.
En su comparecencia ante la Comisión especial del Senado para erradicar el racismo y la xenofobia del deporte español, Sáez Regalado aseguró que los "ultras" llevan mucho tiempo en los campos de fútbol y "de una vez por todas hay que tomar medidas, aunque duela, para erradicarlos del mundo del deporte, porque no pueden estar ni dentro de un campo ni de una sociedad", sentenció.
A su juicio, las actuaciones racistas y xenófobas en los estadios de fútbol antes eran hechos aislados y ahora cada vez aparecen con más frecuencia y eso "es preocupante" porque puede trasladarse a otros deportes, insistió.
"Nos gustaría que estas actitudes se erradicaran totalmente, cuanto antes, porque pueden trasladarse a otros deportes". Sáez Regalado explicó que hay seguidores en otros deportes que pueden verse reflejados en esos grupúsculos "ultras" y reproducirse en las canchas.
El presidente de la Federación Española de Baloncesto apostó por la puesta en marcha de medidas continuadas en el tiempo y en la formación desde los centros escolares, a donde dijo hay que llevar el deporte sano, porque es "barato" y se actúa desde el principio, donde surjen los problemas.
Animó a los parlamentarios a recomendar la puesta en marcha de campañas como la iniciada por la FEB, en colaboración con la Junta de Andalucía, donde trabajan en los colegios para concienciar de la necesidad de hacer deporte sin prejuicios racistas o xenófobos, y llamó la atención de los padres que, a su juicio, también fomentan algunas actitudes poco recomendables.
"El nivel de competición al que los padres están intentando inducir a los chicos lleva aparejados, a veces, actuaciones y hechos violentos". Y, añadió, "aunque es la excepcionalidad, me gustaría que se pudieran tomar medidas y llamar la atención porque lo que irradian los padres es lo que van a transmitir a los niños y a los deportistas".
"Ni tolerancia ni indiferencia", incidió el presidente de la FEB, ante los hechos racistas y xenófobos, y explicó que no se pueden atajar sólo con campañas publicitarias sino que éstas deben ir acompañadas de actuaciones y trabajo en los sitios donde verdaderamente están los problemas.
"Cómo no se ataje desde abajo, en los niveles educativos y formativos, como el deporte no sea una vía integradora y se saque a la calle desde edades muy tempranas, al final estas actitudes persistirán", concluyó.
(SERVIMEDIA)
01 Mar 2006
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