Fogué destacó que la Diputación cree en el principio de que los problemas, como la actual crisis económica, pueden convertirse en "oportunidades". Lo dijo durante la inauguración de la Jornada de los Economistas, junto al consejero catalán de Economía, Antoni Castells, y el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu.

Aun cuando reconoció que la crisis afecta también a la Diputación de Barcelona, Fogué aseguró que esta administración apuesta con "decisión" para ofrecer a los ayuntamientos diferentes instrumentos de ayuda, entre los cuales destacó el Plan de Concertación 2008-2011.

Este plan supone una aportación directa de 200 millones de euros, que a su vez implicarán una inversión pública local total inducida de más de 600 millones de euros estos cuatro años, destinados a la mejora de equipamientos e infraestructuras locales.

Subrayó que uno de los ejes estratégicos de la Diputación es la dinamización económica en el ámbito local, y explicó que la Diputación cuenta con dos instrumentos de apoyo a la financiación municipal: el Programa de Crédito Local, que este año ha supuesto la negociación de paquetes de crédito destinados a los ayuntamientos por un valor de 110 millones de euros, con una aportación de la Diputación de 15 millones por subvencionar los intereses; y el Programa de "la Caixa" de Crédito, pensada más para los municipios pequeños, con 12 millones de euros en préstamos sin interés que los ayuntamientos pueden devolver en diez años.