Tras alabar la tarea de la cámara madrileña en la inentivación de relaciones empresariales entre los dos países, Robinson hizo un llamamiento a los inversores nacionales que para que eleven sus relaciones comerciales e industriales con Iralanda.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio, Adrián Piera, dijo que, "aunque los intercammbhios entre ambas naciones han ido aumentando paulatinamente, todavía pueden y deben alcanzar un nivel más satisfactorio".

Piera señaló que "debemos apoyar a nuestros hombres de negocios animándoles a seguir rabajando con constancia", y señaló la idea delas empresas mixtas como una de las fórmulas más idóneas para facilitar esta tarea.

Irlanda, con 3,5 millones de habitantes, registró entre 1987 y 1990 un ritmo de crecimiento económico anual del 4,8 por cien, y en 1992 alcanzó un superávit en su balanza comercial de 752.000 millones de pesetas.