González aclaró que, aunque el acusado, Juan Maeso, no podrá hacerse responsable económicamente de estas indemnizaciones, espera que "la Consejería de Sanidad, la Generalitat o el Ministerio de Sanidad se ocupen de ello", si bien especificó que "todo el dinero del mundo no basta para compensar el sufrimiento de las víctimas".

Amparo González afirmó creer en la Justicia, por lo que en su opinión, Maeso irá a la cárcel después de este juicio que los afectados esperan desde hace siete años. "Las pruebas son muyelocuentes. La similitud entre el genotipo del virus de Maeso y el que sufren los afectados no se puede negar", precisó.

También incidió en las duras consecuencias que el contagio de hepatitis C tuvo en los 273 pacientes que sobrevivieron (tres murieron como consecuencia del contagio), que a raíz de ello se han visto afectados en su vida personal y laboral.

"Tienen miedo de este juicio", remarcó Amparo González. "Desean preservar su intimidad, pero sienten temor ante el riesgo de que su caso se trate como un espectáculo morboso".

La presidenta de la Asociación criticó, además, la gestión de este juicio. "Se ha dedicado una importante suma de dinero para la preparación de la sala. Un dinero que se podría haber utilizado para indemnizar a las víctimas", subrayó.

Mañana comenzará el juicio de Juan Maeso, en el que el fiscal pide 2.214 años de cárcel (aunque, en caso de condena, Maeso cumpliría un máximo de una veintena). Las indemnizaciones para los afectados oscilan entre los 26 millones de euros exigidos por el fiscal y los 48 que llegan a solicitar algunas acusaciones particulares.