Atienza explicó que la propuesta actual, que supondría el arranque de 300.000 hectáreas de viñas en España, está paralizada por las diferentes posiciones de los países, y aludió a la "economía de medios" para no gastar tiempo y energía en este tema.

"No es necesario gastar determinadas energías para avanzar en una reforma con la que no estamos de acuerdo", señaló. En este sentido, dijo que incluso para retirar la propuesta actual, lo mejor es que el Consejo de Ministros lo proponga a la propi Comisión.

Este planteamiento del ministro chocó radicalmente con la postura defendida por el portavoz de Agricultura del PP, Miguel Ramírez, que argumentó que ahora es el momento adecuado para proceder a esta reforma, para eliminar incertidumbres y dar tranquilidad al sector.

En cambio, el Gobierno español intensificará sus esfuerzos para conseguir aprobar durante la Presidencia española la reforma de la OCM de frutas y hortalizas, cuya propuesta está a punto de ser aprobada por la Comisión.

Atienza manifestó que si dicha propuesta se ajusta, en líneas generales, a las directrices del documento de reflexión sobre este tema presentado el año pasado, la reforma podría aprobarse en el Consejo de diciembre de 1995.

El ministro también se mostró confiado en aprobar la nueva OCM del arroz, y dijo que el Gobierno español tiene un mandato para desbloquear la de la patata.