En su intervención, Dancausa destacó el esfuerzo de muchas mujeres en avanzar hacia la igualdad de oportunidades. En su opinión, en la actualidad ya existe una base igualitaria en la sociedad, si bien reconoció que aún persisten factores iscriminatorios en el entorno laboral.

"El acceso de las mujeres al trabajo remunerado ha supuesto una de las transformaciones más importantes de los últimos tiempos", dijo Dancausa, quien añadió que, "no obstante, esta incursión laboral de las mujeres no se ha producido en igualdad".

En este sentido, enumeró algunos de los obstáculos que encuentran las mujeres en el mercado de trabajo, como la desigualdad en el acceso y en las condiciones de trabajo, la persistencia de cláusulas discriminatoriasen la negociación colectiva, la violencia en todas sus formas y la grave discriminación que suponen las diferencias retributivas entre mujeres y hombres por la realización de trabajos iguales o de igual valor.

Por su parte, Soledad Blanco, jefa de la Unidad de la Dirección General V de la Comisión Europea, destacó la importancia de seguir trabajando por lograr la igualdad salarial entre hombres y mujeres, "que es la piedra angular de la igualdad de oportunidades".

28% MENOS

Destacó que el salaro medio bruto de una mujer en Europa es un 28% inferior al de un hombre y se comprometió a trabajar por divulgar esta guía en Europa, ya que "es un documento de trabajo y una herramienta concreta que va a dar resultados".

La "Guía de Buenas Prácticas para lograr la Igualdad Salarial" es uno de los resultados del proyecto que, bajo el título de "Igualdad de Oportundiades entre Mujeres y Hombres en el Mercado de Trabajo", lleva a cabo el Instituto de la Mujer, y que persigue promover la igualdad salaria entre mujeres y hombres por el desarrollo de trabajos de igual valor.

Según Dancausa, este proyecto, cofinanciado a través del Cuarto Programa de Acción Comunitaria para la Igualdad de Oportunidades entre Mujeres y Hombres (1996-2000), responde a la preocupación del Instituto de la Mujer y de sus socios sobre las diferencias que existen en materia de retribución, así como de la necesidad de crear medidas de acción positiva y herramientas que ayuden a concienciar a la sociedad.

La publicación coniene una propuesta de acciones de carácter interdisciplinar, entre las que destacan la aplicación de un sistema informático de detección de la discriminación salarial en las empresas, y de un sistema de baremación de puestos de trabajo que permita equiparar distintas tareas o funciones, asignando igual salario a aquellas que resulten de igual valor.

Asimismo, recoge algunos de los datos más destacados sobre la situación de la mujer en el mercado laboral en los cinco países que participan en el proyect: Bélgica, Francia, Portugal, Reino Unido y España.

Así, destaca como la incorporación de las mujeres al trabajo se ve afectada por el estado civil, siendo España el país con menor incorporación de mujeres casadas. También revela cómo a mayor nivel educativo se ven incrementadas las posibildiades de encontrarse activa; la concentración de mujeres o de hombres según los sectores y las categorías; y el mayor número de contratos a tiempo parcial que soportan las mujeres.