LAS PREJUBILACIONES LE CUESTAN AL ESTADO 100.000 MILLONES ANUALES

- 7 de cada 100 parados que cobran el desempleo son prejubilados

- Pimentel anuncia que la próxima revisión del Pacto de Toledo deberá poner freno a este sistema de regulación d empleo

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Manuel Pimentel, abrió hoy el debate sobre la viabilidad de mantener el actual sistema de prejubilaciones español, que le cuesta al Estado unos 100.000 millones de pesetas anuales.

Pimentel presentó hoy en Madrid un amplio informe elaborado por su departamento sobre la situación de las prejubilaciones, y aseguró que se trata de "un modelo perverso" que expulsa del ámbito laboral a una persona joven física y mentalmene, lo que supone un "fracaso" del actual sistema.

Según el informe, siete de cada cien españoles que cobran actualmente el paro son prejubilados -no parados efectivos-, lo que supone que el pasado mes de mayo un total de 55.100 personas accedieron al desempleo por esta vía. Los salarios de estos jubilados supondrán para las arcas públicas un gasto de más de 84.000 millones de pesetas durante el presente año.

Además, los prejubilados reciben también indemnizaciones por despido en las que el Estadoaporta un 40 por ciento y que supondrán un coste adicional de otros 17.000 millones de pesetas.

En cuanto al perfil del prejubilado, se trata de un hombre de entre 55 y 59 años. De hecho, sólo el 12,7 por ciento de ellos son mujeres y únicamente un 13 por ciento de los que dejan de trabajar, lo hace antes de cumplir 54 años.

PACTO DE TOLEDO

Ante estos datos, Pimentel aseguró que "no le hacen feliz" los procesos de prejubilaciones que se están realizando actualmente, máxime cuando además se prodcen en empresas con beneficios.

No obstante, recordó que, con la actual normativa, el Estado no puede hacer nada y únicamente se limita a contrastar la corrección de los expedientes de regulación de empleo (ERE), que son en su mayor parte el orígen de las prejubilaciones.

Pimentel dejó muy claro que "es el momento de abrir el debate" sobre esta cuestión, para intentar romper la tendencia a la prejubilación, pero no precisó sobre ningún modelo capaz de evitar este problema, como podría ser impedirque los prejubilados accedieran a la prestación por desempleo. "No vamos a hacer a corto plazo una modificación legal", precisó.

Destacó que únicamente se trata, por ahora, de abril el debate con los agentes sociales para que, en la próxima revisión del Pacto de Toledo (prevista para el año 2000), se tenga en cuenta este aspecto e incluso se habiliten mecanismos para "incentivar" a quienes opten por prolongar su edad de jubilación más allá de los 65 años.

JUBILACION ANTICIPADA

Pimentel aclaró qe el concepto de jubilación anticipada, en ocasiones mezclado con el de prejubilación, es una cuestión completamente diferente.

De acuerdo con la normativa vigente, sólo los trabajadores que cotizaron antes de 1967 y los de determinados regímenes especiales de la Seguridad Social pueden acceder a la jubilación anticipada, que sólo se puede alcanzar a los 60 años.

Ahora bien, sumando los prejubilados con los que se jubilan de forma anticipada, la edad real a la que los españoles dejan de trabajar ueda establecida en los 62,5 años, con la circunstancia de que es mayor el número de las personas que se jubilan anticipadamente que el de los que optan por dejar de trabajar a los 65 años.

En cuanto a la evolución de las jubilaciones anticipadas, en los últimos años se ha experimentado un descenso, como lo demuestra que de 115.566 jubilados con menos de 65 años en 1995 han pasado a 83.401 en 1998. Según los expertos, la bajada en las prejubilaciones y jubilaciones anticipadas se correponde con años d bonanza económica.

(SERVIMEDIA)
24 Jun 1999
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