Así se desprende de los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea recogidos por Servimedia, que muestran que el precio de la gasolina se ha elevado de los 1,752 euros por litro hasta los 1,759 euros, mientras que el del diésel ha pasado de 1,668 a 1,685 euros.

Con respecto a hace un año, la gasolina es un 4,7% más cara, mientras que el diésel es un 7,5% más barato. No obstante, entonces se aplicaba la bonificación de 20 céntimos por litro aprobada por el Gobierno, por lo que, si se tiene en cuenta el impacto del fin de este descuento fiscal sobre el bolsillo de los consumidores, la gasolina y el diésel han subido de media un 18,9% y un 3,9%, respectivamente.

Con los precios de esta última semana, llenar un depósito de 55 litros de gasolina cuesta ya 96,74 euros, es decir, 38 céntimos más que la semana anterior. Por su parte, un depósito de un vehículo de gasóleo conlleva un gasto que asciende a 92,67 euros, 0,93 euros más que en la última referencia.

Con estos precios, la gasolina ya cuesta un 5,8% más que al del inicio del conflicto bélico en Ucrania, mientras que el precio del gasoil se ha incrementado un 13,9% desde la misma fecha. Entonces, la gasolina se situaba en 1,592 euros, a 21 de febrero de 2022, y el diésel a 1,479 euros.

No obstante, el importe medio de la gasolina en España sigue por debajo de la media de la eurozona, donde el precio de venta al público del litro de gasolina se ha situado en 1,922 euros por litro, y el del gasoil también, ya que es de 1,855 euros.

También es inferior el de la gasolina a la media de los 27 países de la UE, que se sitúa en los 1,84 euros por litro, y el del gasoil, puesto que es de 1,795 euros.