El portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, anunció esta iniciativa después de que sus tres iniciativas debatidas en la Diputación Permanente de hoy salieran derrotadas por la oposición del resto de las fuerzas políticas.

Zaplana exige que Bono explique en sede parlamentaria "lo que ha querido contar en algunos medios de comunciación" sobre "el balance y la valoración que él hace sobre las declaraciones de un teniente general y sus decisiones" al respecto. Su comparecencia constituiría el "el mínimo respeto al Parlamento que tiene que tener el Gobierno", aseguró.

El portavoz popular se mostró convencido de que al Gobierno "no le gusta" que le pidan explicaciones y prefiere hacer esos debates "en sedes de partidos, en cafeterías, en hoteles, en restaurantes donde se reúnen y están decidiendo el futuro de nuestro país de forma oculta y con el desprecio a los representantes del 50 por ciento de los ciudadanos".

Explicó que "desde el año 1981 jamás se había hablado de las posiciones del Ejército o de lo que podían opinar los mandos militares. Habíamos vivido en la mayor normalidad. Ese debate estaba ajeno a la discusión política", dijo Zaplana, quien aventuró que "algo habrá pasado en nuestro país para que retomemos debates que estaban superados con el consenso de todos".

"Que volvamos a hablar de estos temas en España es triste, digo triste, no quiero decir peligroso. Es penoso que esos debates nos vuelvan a acompañar. Hemos retrocedido 30 años", subrayó.