La ministra de Administaciones Públicas, Elena Salgado, explicó a la diputada popular que el "contrato de servicios de limpieza y desinfección en zonas de gran confluencia de personas se encuadra en la política de higiene y previsión en el trabajo".

Además, señaló, este contrato es la "continuación" de otro que se viene firmando todos los años desde el año 1999, también durante los años en que el señor Rajoy fue vicepresidente y el contrato en esos años está firmado por Ana Pastor".

En su intervención inicial, Dolors Nadal arremetió contra "la Corte del Faraón" en que se ha convertido La Moncloa y que mantiene a Zapatero "alejado" de la realidad social. "Cuando el paro crece y aumenta la asistencia a los comedores sociales, el presidente del Gobierno se gasta casi 45.000 euros en el alquiler de tazas de WC tuneadas. Pero además, el aquiler es por un año y, si queda satisfecho, la cosa se nos va a poner en 200.000 euros", afirmó.

La ministra le respondió que el planteamiento de esta pregunta permite a los españoles ver "adónde nos conduce su política: a fijar su atención en los urinarios de Presidencia".

La revelación de que el contrato data de época popular descolocó en un primer momento a la diputada popular, que se limitó a afirmar que lo dicho por la titular de Administraciones Públicas "no se corresponde con la realidad", aunque no aportó ningún dato más sobre el particular.

Nadal aseguró estar "conmovida" por interés del Gobierno en la "limpieza y el ahorro", pero advirtió que los hogares españoles lo están pasando mal, mientras el presidente se dedica a "derrochar".

"¿Tan mal huelen las políticas socialistas que tienen que utilizar despensadores de fragancia? ¿tanto germen desatado corre por La Moncloa?", se preguntó con ironía antes de afirmar que los recursos públicos no se pueden usar para "satisfacer excentricidades del presidente. No es ético".

Salgado acusó al PP de volver a instalarse en "el relativismo moral" y de practicar "la mentira permanente". "Si de verdad les preocupa la ética ¿porqué mantienen en sus puestos a altos cargos imputados en graves delitos allí donde gobiernan?".

La ministra se se preguntó "de qué austeridad" hablan los poulares, "¿quizá de la que ustedes practican en la sanidad o en la educación o de la que practican subiendo el transporte en más de un 8%, como en Madrid?".

"Sabemos que a algunos de sus dirigenes no les gustan los urinarios, ni digitales, ni de los otros", le espetó Salgado, "y que prefieren utilizar, como así lo han dicho, la sede de algún partido político".

Sin embargo, concluyó, "mientras ustedes se dedican a generar desconfianza el Gobierno sigue gobernando y tratando de superar la crisis económica. Y ustedes, en vez de arrimar el hombro, se dedican a sembrar insidias".