En la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, Sáenz de Santamaría aprovechó su pregunta a la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, para responder al propio presidente.

El pasado domingo, durante un acto electoral, José Luis Rodríguez Zapatero defendió sus medidas contra la crisis y proclamó que la solución "será social, o no será". "Será social, pero no socialista, y será con empleo, o no será", advirtió hoy Sáenz de Santamaría.

La portavoz del PP preguntó abiertamente a la vicepresidenta por qué cree el Gobierno que España no llegará a cinco millones de parados, y Fernández de la Vega respondió acusando a este partido de "intentar sacar tajada" del incremento del paro en términos electorales, descalificando al Ejecutivo y guiándose por "la pasión por el voto".

Sáenz de Santamaría recordó que cuando el paro afectaba a dos millones y medio de personas, la vicepresidenta decía que el Gobierno estaba "gestionando" la situación. Tres meses después el desempleo llegaba a los tres millones y el Gobierno pedía "paciencia y tranquilidad" a la espera de los efectos del Plan-E.

"Efectos no hemos visto ninguno" a pesar de los carteles, y cuando el paro superaba los tres millones y medio la vicepresidenta, "después de darse una vuelta por Madrid y Valencia", seguía afirmando que habría resultados.

Fernández de la Vega reiteró que España está atravesando "el peor momento de la crisis", el Gobierno ha tomado medidas para "amortiguar el golpe" y a pesar de la necesaria prudencia se puede ver "algún síntoma muy incipiente de recuperación".

Acusó al PP de "intentar constantemente sacar tajada" incluso del incremento del paro, a lo que Sáenz de Santamaría replicó que los ciudadanos pagan al Gobierno por buscar soluciones, "no excusas".

La vicepresidenta aseguró que el Gobierno se preocupa por los parados mientras el PP "juega a la descalificación" y busca "la gracieta y el titular facilón", y emplazó a Sáenz de Santamaría a explicar sus propuestas a los trabajadores de los sectores en los que se están inyectando recursos públicos, como el automóvil.

Las recetas del PP, sentenció, son "las de Aznar y la liberal", abaratamiento del despido y el recorte del gasto, y la prueba de que eso no es "una varita mágica" es que a la vista de los datos no funciona en las comunidades autónomas donde el PP gobierna. "La única verdad es que a ustedes les crecen los bigotes y las facturas sin pagar", añadió.