Jesús Pedroche, del PP, señaló que la situación de Madrid como capital del Estado, provoca la convocatoria de numerosas manifestaciones, no sólo de ciudadanos madrileños, sino de otras comunidades autónomas, que buscan la enorme resonancia que estas movilizaciones adquieren ante la opinión pública y el Gobierno central.

Uno de los puntos de la proposición aprobada indica que "la autoridad competente deberá comunicar, con la suficiente anteación, que nunca será inferior a 24 horas, a través de los medios de comunicación la fecha, horario e itinerario de cada manifestación convocada".

Los populares, sin embargo, no consiguieron sacar adelante otro de los puntos de su originaria propuesta, que preveía la creación de un órgano consultivo estable como cauce de participación de los ciudadanos, integrado por representantes del Ayuntamiento, grupos parlamentarios de la Cámar regional, sindicatos, empresarios, vecinos, y otras entidades.

Pr otro lado, IU, que no apoyó el proyecto aprobado con los votos de PSOE y PP, porque teme un "nuevo recorte de las libertades públicas", presentó un texto alternativo.