Lasheras ha manifestsdo su satisfacción porque el problema de la violencia doméstica haya trascendido los límites del hogar y de las organizaciones de mujeres y haya pasado a formar parte de la conciencia colectiva, "aunque", apuntó, "todavía queda mucho por hacer en el medio rural, donde las mujeres sufren una gran presión social".

Para la senadora popular, han sido e "gran relevancia" las modificaciones introducidas en el Código Penal y en la Ley de Enjuiciamiento Criminal en materia de malos tratos a mujeres, como son la medida cautelar que permite el distanciamiento físico entre el agresor y la víctima, así como la creación en cada Fiscalía de un servicio especial de violencia familiar.

Por último, Lasheras apostó por el apoyo a las víctimas mediante casas de acogida en todas y cada una de las provincias españolas y apoyo a los agresores para su reconducción picológica y reinserción en la sociedad.