Los populares no desean hablar de empresas concretas a privatizar, aunque reconocen que su programa en este sentido afectaría en primer lugar a las "joyas de la Corona", y concretamente Argentaria, Endesa, Repsol o Tabacalera, "en las que estaríamos dispuestos a llega a su privatización total".

Sin embargo, afirman que no quieren plantear la polémica en términos de ésta o aquella empresa a privatizar, puesto que reconocen que este tipo de planteamientos hechos desde fuera del Gobierno se quedan cojos por falta de información de la que sólo dispone el propio Ejecutivo.

Reconocen además que la decisión sobre el momento de emprender estas privatizaciones depende de variables como la situación de liquidez en los mercados y la necesidad de proteger las empresas deun excesivo peso de la inversión extranjera en ellas.

La reflexión de los expertos del PP y el estudio que pueda surgir de ella pretende establecer como paso previo a la privatización una serie de criterios y decisiones encaminados a una reorganización de las empresas y organismos públicos, con el fin de que resulten atractivas para el inversor privado.

En este sentido, reconocen que el modelo sería similar al puesto en práctica en Argentaria, "donde por separado había entidades como el Banco de rédito Local que hubiera sido imposible privatizar".

Las citadas fuentes han señalado que la reorganización afectaría a entidades como el INI, y su carácter de 'holding', pero también a organismos como la Dirección General del Patrimonio.