"Para que todo esto sea una realidad, es preciso que se haga una divulgación correcta de la nueva ley, de las obligaciones que implica para las industrias y de las posibilidades de atender estas necesidades que tiene la infraestructura industrial y de servicios española", indica el PP.

La nueva Ley de Prevención de la Contaminación prevé que una gran parte de las instalaciones industriales de España deberán solicitar una autorización integrada antes del 30 d octubre de 2007, sin la cual no podrán prolongar su actividad. Algunas de las empresas deberán realizar importantes inversiones para adaptar sus medios a esta nueva normativa y optar a dicha autorización.