Jesús Pedroche, senador del PP, insiste, en una moción presentada en la Cámara Alta, en que se sancione con cierres de hasta dos años los recintos deportivos de clubes y sociedades deportivas que, de una forma y otra, amparan a los colectivos de hinchas violentos.

Según datos del Ministerio del Interior manejado por el PP, en España existen 101 grupos violentos en torno al deporte, de los qu 91 son forofos del fútbol, 4 del baloncesto, 4 del balonmano y dos del futbol sala.

En total se calculan que hay unos 12.000 ultras, dato que, para Peroche, reflejan con bastante elocuencia la "grave situacion de la seguridad en el deporte".

Según Pedroche, los mil millones de pesetas que se destinan cada temporada para la protección y seguridad de los acontecimientos deportivos, servirán muy poco "si la labor policial no se respalda adecuadamente por el firme compromiso de los clubes en no apoyr en modo alguno a los grupos de hinchas violentos".

Esta propuesta de cierre es una "coacción" para que dichas sociedades deportivas retiren ciertas formas de apoyo a los hinchas y evitar así que éstos den rienda suelta a su violencia.

Esas "formas de apoyo" son: la entrega o venta a bajo precio de entradas para los partidos, el suministro de material y el apoyo para la realización de rifas o similares con fines financieros y el apoyo económico o de transporte para facilitar los desplazamientos. El objetivo último de esta moción es, según ha confesado Pedroche, dotar a la autoridad gubernativa de un instrumento más en la lucha contra la violencia en los espectáculos deportivos, ya que, si no, "correremos el riesgo de que nos pase lo que a alguno de nuestros vecinos", como ocurre con la actitud irracional e injustificada de los hinchas futbolísticos del Reino Unido.