El Grupo del PP en el Ayuntamiento entiende que "el monumento a la División Azul tiene un sentido histórico y artístico similar al del monumento a Azorín o cualquier otro de la ciudad, y nuestro deber es defender el patrimonio de la ciudad".

Garrido acusó al equipo de gobierno socialista de "desviar la atención con el asunto de a División Azul de otros problemas que tiene la ciudad".

La concejala del PP que votó en contra del traslado en la comisión de urbanismo, Isbael Egea, dijo hacerlo por su propio criterio, aunque remitió al secretario del Partido Popular, Emigdio de Moya, para una valoración de la cuestión.

El Ayuntamiento decidió desmontar el monumento, con los votos de PSOE e Izquierda Unida, mientras se le busca una nueva ubicación. Por su parte, la asocación de ex combatientes de la División Azul anunció la prsentación de un recurso contencioso administrativo contra la decisión municipal.

A este respecto, la alcaldesa de Albacete, Carmina Belmonte, manifestó que ha comunicado a los ex combatientes la decisión de traslado del monolito, "ofreciéndoles dos soluciones, o instalarlo, dado su carácter funerario, en el cementerio, o llevarlo a un lugar privado que me propusieran".

Por su parte, el portavoz de Izquierda Unida, José María López Ariza, manifestó que el monumento "debe ser desmantelado porque "e feo, estorba y, además, porque es lamentable que en Albacete esté el único monumento del mundo en recuerdo de los nazis".