Así lo aseguró a Servimedia el portavoz del Partido Popular en el Parlamento Europeo, Gerardo Galeote, quien explicó que se están manteniendo "conversaciones" con dirigentes de la familia política a la que pertenece el PP para ayudar a que España esté representada en la cumbre del 15 de noviembre.

Galeote señaló que estos movimientos son "motu proprio" porque ni el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ni la dirección del PSOE han solicitado ayuda hasta el momento al Partido Popular para conseguir que el presidente español esté presente en la cumbre del G-20.

El PP está aprovechando, según Galeote, sus buenas relaciones con dirigentes populares europeos e internacionales para conseguir que el presidente del Gobierno de España sea invitado a la cumbre.

La dirección del PP posee muy buenas relaciones con el presidente de la Comisión Europea, el portugués José Manuel Durao Barroso; con el presidente de turno de la Unión Europea, el francés Nicolas Sarkozy; y con la canciller de Alemania, Angela Merkel, entre otros, ya que todos ellos pertenecen "a la misma familia política".

Galeote subrayó que el PP quiere dar "un apoyo activo aunque discreto" al Gobierno español, aunque desde el PSOE haya algunos dirigentes que estén "insultando y caricaturizando" la posición del principal partido de la oposición.

En este sentido, deseó que Zapatero "tenga éxito" en su empeño por acudir a la cumbre de Washington con los dirigentes de los países miembros del G-20 y pidió que, si no lo consigue, "tome nota y saque conclusiones" sobre la política exterior que ha desarrollado los últimos cuatro años y la que debe poner en marcha a partir de ahora.