Como el PP, el Grupo Socialista presidirá con toda seguridad la Comisión de Presupuestos y la de Control de RTVE, dos comisiones tradicionalmente asignadas a una formación de la oposición. También quiere conservar la Comisión Mixta para la Unión Europea, que hasta la disolución de las Cortes estuvo en manos de la diputada del PP Isabel Tocino.

Las otras dos presidencias que el PP cederíalos socialistas no están decididas, aunque podrían volver a ser Infraestructuras y Administraciones Públicas, como tuvo el PP en la anterior legislatura. Joaquín Almunia declaró que todavía no han comunicado sus preferencias, pero en cualquier caso no harán "cuestión de Estado" de ello.

Según explicó Luis de Grandes, el Grupo Popular ha aplicado la "teoría del espejo" en la cesión de comisiones al PSOE. "Que se miren en el espejo, vean la correlación de fuerzas saliente de las elecciones y se dén cueta que han perdido como nosotros en la pasada legislatura", afirmó.

De Grandes manifestó que, con toda probabilidad, CiU volverá a tener una presidencia (en la anterior legislatura Joaquim Molins ejerció la de la Comisión de Industria), y el PNV la tendrá previsiblemente en el Senado. Así se lo ha pedido al portavoz del PP en la Cámara Alta, Pío García Escudero.

En lo que no se han puesto todavía de acuerdo es a la hora de decidir cuál de los dos grupos "cede" una presidencia de comisión a Izquieda Unida.

De Grandes indicó que ese tema no es del "negociado" del PP, porque ya hará bastantes concesiones a los grupos más afines ideológicamente. Entretanto, los socialistas no aceptan, como le sugieren los populares, ceder una de sus cinco presidencias a la coalición de Julio Anguita, como hizo en el reparto de la Mesa del Congreso.

Pese a este escollo, tras entrevistarse con Almunia, el portavoz del PP en el Congreso se congratuló del "buen clima" en el que están discurriendo las primeras toas de contacto con el principal grupo de la oposición.

En este sentido, se mostró convencido de que no habrá ningún problema para el reparto de las distintas dependencias del Congreso, ni tampoco para la nueva ubicación de los 350 diputados en el hemiciclo.