El organigrama presenta cinco macroconcejalías, cuatro delegaciones dependientes de éstas y numerosos coordinadores de apoyo para estas áreas.

Incluye además dos secretarías para los grupos de la oposición, un"liberado" y un coordinador al menos por cada uno de los tres grupos existentes, así como siete "liberados", más el alcalde, de los diez que forman el grupo socialista.

Según José Aguado, portavoz del grupo popular, el PP ha rechazado la propuesta de negociar una organización política basada en un organigrama "cuya única intención es justificar dedicaciones exclusivas y colocaciones de personas colaboradoras del PSOE en el ayuntamiento".

Aguado calculó que el coste de esta estructura supondría má de 200 millones de pesetas si se mantuvieran los actuales sueldos de los ediles.

El partido con mayor número de votos de la oposición considera que la organización municipal debería negociarse en su integridad con los tres grupos de la oposición cuando se gobierna desde un partido que ha perdido la mayoría.

El edil popular indicó a Servimedia que si lleva a pleno la propuesta tal y como está, no saldrá adelante, excepto "si existe un pacto encubierto con Izquierda Unida para apoyar la propuesta ocialista". Añadió que si el alcalde intenta imponer el organigrama por decreto, "puede durar muy poco tiempo en el sillón".

Por su parte, IU ha indicado que no tomará ninguna decisión al respecto hasta el próximo lunes, día en que se reunirá su consejo político, aunque de momento consideran excesiva la propuesta presentada por los socialistas.