Fuentes del partido liderado por Alberto Núñez Feijóo exigieron “una rectificación por parte del Gobierno de ERC”, al igual que emplazaron al Ejecutivo de Pedro Sánchez a posicionarse acerca de estas manifestaciones.

“No es difícil presuponer qué dirían algunos actores políticos y mediáticos si un Gobierno del PP culpara de las carencias de la educación pública en una comunidad autónoma a los niños procedentes de otros países”, señalaron las citadas fuentes del PP.

Así se pronunciaron después de que el secretario de Políticas Educativas de la Generalitat de Cataluña, Ignasi Garcia Plata, hablase de una "sobrerrepresentación" de alumnado inmigrante en la muestra tomada para los resultados de Cataluña en el informe del Programa para la Evaluación de Alumnos PISA 2022.

“La responsabilidad no es de los estudiantes, sino de quienes diseñan las políticas educativas desde el Gobierno de España y de quienes las aplican, en este caso, el Gobierno autonómico”, indicaron desde el PP, partido para el que “el único precedente xenófobo que compite en intensidad con el que ha trasladado el Ejecutivo de Pere Aragonés está en aquellas declaraciones del expresidente catalán Quim Torra que calificaba a los españoles como bestias taradas”.

Desde el PP pusieron el foco en que “estos son los socios de Pedro Sánchez y a los que el Gobierno concede la potestad de elegir un árbitro que medie entre España y una de sus comunidades autónomas”.

“Los únicos culpables de que los alumnos catalanes se sitúen a la cola del rendimiento en España y de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en matemáticas, lectura y ciencias son los partidos independentistas y el Gobierno socialista”, enjuiciaron las citadas fuentes.

En este sentido, incidieron en que “los socios del PSOE han gobernado en la última década en esa comunidad autónoma aplicando una política educativa que se ha caracterizado por la inmersión lingüística y el ataque a la lengua común de todos los ciudadanos, como es el castellano”.

Asimismo, culparon al Gobierno central “por los efectos perversos de una ley socialista de educación, la conocida como ‘ley Celáa’”, al considerar que “castiga la cultura del esfuerzo y permite pasar de curso con asignaturas suspendidas”.

En este sentido, el partido de Feijóo prometió “seguir dando la batalla por la defensa de un sistema educativo vertebrado, de calidad y en el que se garantice la libertad de elección de las familias”.