La reforma que quieren aplicar los populares permite que sea la Mesa del Senado, donde tienen mayoría, quien califique como urgentes u ordinarias las proposiciones de ley que lleguen desde el Congreso, como sería el caso de la hipotética ley de amnistía a los encausados por el 'procés'.

Esto permitiría que el Senado pueda estar negociando hasta dos meses la medida y no solo 20 días como establece la Constitución en caso de que el Congreso tramitara la proposición de ley por la vía de urgencia. El PP pretende blindarse para poder estudiar el texto con el máximo margen que permita la Carta Magna.

Maroto también explicó que el plazo para presentar alternativas será hasta mañana a las 12.00 y que la reforma del Reglamento se incluirá como el último punto en el orden del día del Pleno. Asimismo, relató que tras esto se abrirá el plazo de enmiendas para el resto de grupos parlamentarios.

Por otro lado, no reveló cuándo podría aprobarse definitivamente esta reforma ya que, argumentó, corresponde a la Comisión de Reglamento y pronunciarse supondría excederse en sus funciones como vicepresidente del Senado.