La dirección nacional del PP hizo este pronunciamiento mediante un comunicado, una vez que el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha autorizado al Partido Socialista de Euskadi a mantener una reunión con la ilegalizada Batasuna por no encontrar motivos de delito en la celebración del encuentro.

Según informe el PP, esta formación política "tiene el convencimiento de que reunirse con el brazo político de los terroristas, designado por éstos para desarrollar la negociación política que pretenden, viola la legislación vigente y los principios básicos del Estado de Derecho y de la Democracia".

Sin perjuicio de que el magistrado Garzón "haya renunciado con carácter previo" a prohibir el encuentro entre PSE y Batasuna, el PP pide actuar a posteriori "para evitar que se quiebre impune y gravemente la ley, que se legalice de hecho lo que ha sido declarado ilegal por terrorista por unanimidad del Tribunal Supremo y que se consagre la participación ilegal de Batasuna-ETA en plano de igualdad con los partidos democráticos en las rondas y mesas de negociación que se anuncian para el inmediato futuro".

El PP considera que la reunión viene originada "por la exigencia formulada desde ETA-Batasuna para poner en marcha cuanto antes una mesa de diálogo de partidos políticos que inicie el diálogo político con carácter prioritario en el llamado "proceso de paz", bajo la advertencia de que éste es insostenible si se basa exclusivamente en una negociación no política y de que es el momento de pasar de las conversaciones a las negociaciones políticas".

Los populares consideran "obvio" que desde la izquierda abertzale se destaque la importancia de esta reunión oficial porque "supera la ilegalización y consolida la creación de una mesa de partidos para la normalización política".