La secretaria ejecutiva de Política Autonómica y Local del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, compareció en rueda de prensa junto a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y el consejero de Justicia de la Xunta, Xesús Palmou, tras mantener una reunión sobre las necesidades de los entes locales.

Barberá denunció que el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero quiere "apartar a la tercera pata del Estado" de las reformas territoriales emprendidas para modificar la Constitución y los estatutos de autonomía.

A su juicio, el Libro Blanco que está elaborando el Ministerio de Administraciones Públicas en esta materia es "un elemento disuasorio para distraer la atención" de los problemas reales que tienen los pueblos y las ciudades.

LIBRO BLANCO

La alcaldesa de Valencia reclamó un sistema de financiación adecuado para que los ayuntamientos puedan abordar las necesidades de los ciudadanos y puso como ejemplo los problemas que está generando en los entes municipales el proceso de regularización de inmigrantes puesto en marcha por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.

Por su parte, Sáenz de Santamaría calificó el Libro Blanco como un "producto de laboratorio" redactado al margen de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), y criticó al Gobierno por no tener "ni una sola idea" y no destinar "ni un solo euro" a la financiación de los ayuntamientos.

La secretaria ejecutiva de Política Autonómica y Municipal dijo que la reforma constitucional emprendida por el Gobierno es "un folletín por entregas" en el que distintos miembros del Partido Socialista van desvelando paulatinamente elementos de la modificación anunciada por Zapatero.

Sáenz de Santamaría exigió al Ejecutivo que deje de gobernar "a golpe de anuncios" y reclamó que sea "serio" a la hora de plantear reformas que afectan, en mayor o menor medida, a todas las administraciones del Estado.