El diputado del PP formuló esta denuncia al comiezo de la sesión plenaria de hoy, en la que se votó el acuerdo aprobado previamente por la Junta de Portavoces, por el que se aplazan para este jueves los debates en pleno y comisión en los que debían comparecer los nuevos ministros incorporados al Gobierno.

Salvo el Partido Popular, todos los grupos parlamentarios dieron su aprobación a la solicitud presentada por el Gobierno.

Rodrigo Rato manifestó en la explicación del voto negativo de su grupo que la mayoría socialista, en connivencia con el Gbierno, "ha cercenado" el derecho de la oposición a ejercer cada semana su derecho de control al Ejecutivo, contemplado en el artículo 111 de la Constitución.

"Sobre todo", puntualizó, "cuando Felipe González no ha hecho una declaración formal a la Cámara sobre su deseo de cambiar al Gobierno".

Para el Partido Popular, hoy se sentó un "grave precedente" en el Congreso, ya que el Parlamento podrá ver alterado su funcionamiento siempre que el presidente del Ejecutivo haga la remodelación "cuando leconvenga".

Según Rodrigo Rato, el aplazamiento de varios puntos incluidos en este pleno significará que muchos de ellos no puedan verse hasta dentro de un mes, porque la próxima semana no hay sesión y la siguiente coincide con las vacaciones de Semana Santa. Después, según los populares, toda la atención política se desviará hacia las elecciones de mayo.

Rato puso como ejemplo la interpelación urgente presentada por su grupo al hasta hoy ministro de Sanidad, Julián García Vargas, sobre el accidene ocurrido en el acelerador lineal del Clínico de Zaragoza.

El portavoz del PSOE, Eduardo Martín Toval, reprochó al Grupo Popular su interés en hacer de esta cuestión una "gran tragedia" y aseguró que "por primera vez en la historia del Congreso, hay un grupo (el PP) que no ha retirado por cortesía sus iniciativas" ante el cambio de Gobierno.

El representante de Izquierda Unida, Nicolás Sartorius, calificó de "razonable" el acuerdo adoptado por la Cámara. Alejandro Rebollo afirmó que la decisión ra de "sentido común", y por tanto, "no se deben sacar las cosas de quicio".