Las autoridades educativas continúan investigando los hechos protagonizados por esta docente cuya identidad no ha trascendido y que presuntamente obligó a un niño de nueve años de un colegio malagueño a comer con rapidez.

Según los denunciantes, la mujer llegó incluso a introducir la cuchara en la boca del niño, lo que le hizo vomitar. A continuación, ordenó al alumno que se tragara los alimentos que había devuelto.

El alumno tuvo que recibir atención médica al sufrir también una fuerte hipertensión arterial, provocada por el disgusto recibido. Según los denunciantes, al niño le apareciron puntos rojos por toda la cara.

Estos hechos fueron denunciados el pasado lunes por el presidente de la Asociación Pro Derechos del Niño (Prodeni) en Málaga, José Luis Calvo, que no especificó los nombres de la profesora, del niño y del colegio donde ocurrieron.