POPULAR AFIRMA QUE HA "RENUNCIADO" A ADORNAR SUS RESULTADOS A CAMBIO DE FORTALECERSE ANTE LA CRISIS
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El presidente del Banco Popular, Ángel Ron, afirmó hoy que la entidad ha "renunciado" a adornar sus resultados del pasado ejercicio a cambio de fortalecerse ante la evolución de la crisis durante el año 2009.
En la rueda de prensa de presentación de los resultados del banco en 2008, Ron aseguró que "ahora hemos decidido renunciar temporalmente al crecimiento del beneficio, reduciéndolo, precisamente en aras al reforzamiento de la solvencia en un entorno especialmente complejo y desafiante".
En este sentido, destacó que "la incertidumbre respecto a la duración y a los efectos de la crisis nos ha decidido a ser una vez más extremadamente conservadores".
Asimismo, Ron señaló que la crisis financiera "está rompiendo dogmas" y aseguró que nunca antes se había oído tantas veces: "por vez primera". Además, apuntó que es la crisis "en la que más veces y más instensamente se han rectificado a peor las previsiones de los diferentes organismos".
"Hay que prepararse para que la crisis sea más larga e incluso peor de lo que prevén los organismos internacionales", advirtió el máximo dirigente de la entidad, quien añadió que "el Popular se ha decantado por estar más fuerte que nunca".
Denunció los "efectos procíclicos" de las normas contables que, en su opinión, contribuyen a "transmitir los efectos negativos de la crisis a todo el sistema".
También defendió que "no es aceptable que cada Gobierno determine lo que considera capital o no", ya que esa situación introduce "factores de confusión en los mercados que impiden comparar fielmente los niveles de capitalización de las entidades".
PERSPECTIVAS PARA 2009
En cuanto al futuro de la entidad para este año, Ron explicó que las expectativas del banco son que el margen de intermediación se expanda en torno al 8%.
Ron apuntó que "el año se ha articulado sobre cuatro ejes de acción irrenunciables que deben ser compatibles entre sí: la lucha cerrada contra la morosidad, la reducción del gap comercial con atención prioritaria al pasivo de clientes, hacer foco en las pymes y en los particulares, y reducir los costes".
En este último caso, añadió que la fusión de los bancos filiales a través de la fusión de oficinas permitirá a la entidad ahorrar 25 millones de euros en 2009 y 50 millones en 2010.
Asimismo, auguró que en el corto plazo las oportunidades para el banco "vendrán a través del crecimiento en el negocio con empresas, ante la retirada de aquellas instituciones que por su situación deban acometer un proceso de desapalancamiento".
También señaló que durante este ejercicio continuará el proceso de cierre de oficinas, una situación que para Ron es "inevitable" ya que existe en el mercado una "sobrecapacidad instalada de sucursales".
En cuanto a la plantilla de la entidad, dijo que seguirá diminuyendo "de forma sustancial" mediante la no reposición de las bajas y a través de prejubilaciones.
Para el presidente del Popular, 2008 se ha caracterizado también por el desplome del sector inmobiliario español, al que la entidad "se ha visto afectada por su exposición a alguna de estas empresas, por lo general clientes de cierta antigüedad que no han podido hacer frente a las adversidades".
En este entorno, el Banco ha decidido "comprar activos de sus clientes, bien para dar una mejor salida a los riesgos, bien por entender que se trata de una oportunidad ante las estresadas condiciones del mercado" y ha optado por relanzar su inmobiliaria, Aliseda.
En 2008, las compras de la entidad en activos a sus clientes se situaron entre los 1.300 y los 1.500 millones de euros.
Sobre los próximos dividendos que dé la entidad, Ron explicó que seguirán manteniendo el "pay out", es decir, el porcentaje de los beneficios que se destina a estos pagos.
(SERVIMEDIA)
30 Ene 2009
J