ESTATUTOS CCAA

LA PONENCIA DEL CONGRESO COMIENZA A REDACTAR LA REFORMA VALENCIANA A PARTIR DE LAS ENMIENDAS PARCIALES

- Alfonso Guerra pide a los ponentes que introduzcan los cambios necesarios para garantizar la plena constitucionalidad

MADRID
SERVIMEDIA

La Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados constituyó hoy la ponencia encargada de redactar el informe sobre la reforma del Estatuto de la Comunidad Valenciana, a partir de las enmiendas parciales presentadas por los grupos parlamentarios.

La sesión de esta Comisión sirvió para designar oficialmente a cada uno de los ponentes: tres del PSOE (Ramón Jáuregui, Ciprià Ciscar y Elviro Aranda), dos del PP (Federico Trillo y Jaime Ignacio del Burgo), y uno de cada uno de los grupos restantes.

Por CiU será ponente Jordi Xuclà, aunque será temporalmente sustituido por Josep Antoni Duran i Lleida. También estarán Agustí Cerdà (ERC), Aitor Esteban (PNV), Isaura Navarro (IU- ICV), Paulino Rivero (Coalición Canaria) y Begoña Lasagabaster, de Eusko Alkartasuna, en representación del Grupo Mixto.

La ponencia comenzó a trabajar inmediatamente a puerta cerrada en una sala de la última ampliación del Congreso de los Diputados que servirá como sede permanente de esas reuniones para el estudio de las reformas estatutarias que lleguen a la Cámara.

Sobre la mesa tienen los ponentes 173 enmiendas presentadas por los grupos parlamentarios al proyecto aprobado por el Parlamento valenciano, con el acuerdo de PP y PSOE.

Entre las enmiendas están las 13 acordadas por estos dos partidos, "más de estilo que de fondo", para garantizar, según explicaron en su momento, la plena constitucionalidad del texto.

Más allá de ese acuerdo, el portavoz socialista, Ramón Jáuregui, expresó con énfasis la voluntad de su grupo de consensuar "todas las reformas con todos los grupos", por entender que para ello sirve este trámite parlamentario.

Jáuregui dejó claro que las reformas estatutarias no responden a ningún "pacto previo" entre partidos sino a acuerdos en cada parlamento autonómico y que, por tanto, cada caso es diferente y como tal debe ser analizado y debatido.

En virtud del acuerdo en el Parlamento valenciano, el portavoz del PP, Federico Trillo, advirtió de que su grupo no aceptará enmiendas en las que vea conculcación de los principios constitucionales, intentos de reproducción de modelos contenidos en otras reformas estatutarias, o mecanismos de imposición de "una determinada visión de los símbolos identitarios" de los valencianos.

Trillo puso como ejemplo de ello algunas de las enmiendas de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), que no entró en el gran acuerdo previo de PP y PSOE. En sus setenta enmiendas pide, entre otras cosas, una financiación "idéntica" a la reclamada en la reforma catalana.

Solicita también en sus enmiendas la denominación de esta comunidad como "País Valencià" y, conjuntamente con Izquierda Unida, CiU, PNV y Grupo Mixto, pide la unidad de la lengua catalana.

360 GRADOS

En su intervención en la sesión de la Comisión Constitucional, el representante de ERC, Agustí Cerdà, alertó de que, sin la incorporación de esas modificaciones, la reforma estatutaria daría "un giro de 360 grados" para quedarse en el mismo punto en el que está el texto vigente.

CiU también ha presentado enmiendas a esta reforma, por ejemplo, para reducir del 5% al 3% la "barrera" electoral para acceder al Parlamento catalán.

El portavoz de este grupo, Josep Antoni Duran i Lleida, precisó que apenas tienen intención de modificar la voluntad expresada por el Parlamento valenciano, en coherencia con su tesis de que tampoco debe ser profundamente alterada la propuesta catalana.

La portavoz de Izquierda Unida, Isaura Navarro, denunció que su grupo tuvo "negada la voz" en Valencia y reclamó que en este trámite se escuche a las minorías. Especial atención prestó a la necesidad de modificar "la gran mentira lingüística y científica" recogida en el proyecto de reforma.

El presidente de la Comisión Constitucional, Alfonso Guerra, dijo a los portavoces y ponentes que deben ser ellos quienes ratifiquen, en su caso, la afirmación de los impulsores de la reforma de que es un texto "reivindicativo pero no rupturista".

Les dijo, además, que son los encargados de introducir los cambios que la soberanía popular, encarnada en el Parlamento, "estime necesarios" para garantizar el pleno respeto a la Constitución, el consenso y la solidaridad territorial.

Corresponde a ellos, también, interpretar la intención de los redactores de la reforma de respetar la voluntad mayoritaria de los valencianos de "participar en condiciones de igualdad" con el resto del Estado en la construcción de la España del siglo XXI, dijo Guerra.

(SERVIMEDIA)
30 Nov 2005
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