Junto a ADIF, la Obra Social Caja Madrid y la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, esta ONG organiza el programa de conservación del águila imperial "Alzando el vuelo", al que pertenece el proyecto para el seguimiento de "Altair".

El polluelo, que comparte nombre con una estrella de la constelación del águila, es ahora "un joven volantón" que permanece en las cercanías del lugar donde nació, cerca de sus padres, "preparándose para la independencia".

Para SEO/BirdLife, el seguimiento del ave con una "webcam"ha resultado "todo un éxito", ya que "Altair" se ha desarrollado "con normalidad" y, "a pesar de que las condiciones ambientales y meteorológicas no siempre han sido favorables, ha salido adelante gracias a la gran experiencia de sus padres".

Todo empezó en el mes de diciembre, cuando esta pareja inició el celo, que concluyó con la puesta a finales del mes de febrero.

Tras 44 días de incubación, el pollo nació en abril y, desde entonces, se ha podido seguir su evolución en directo, desde el Parque Nacional de Cabañeros primero y, a partir del 6 de mayo a través de Internet.