Según informó Marcela Miró, vicerrectora de Estudios y Alumnado de la UPV, que participó en las jornadas que hoy se clausuran en Segovia sobre "La reforma de las titulaciones universitarias", organizadas por la Fundación Universidad-Empresa, el plan se diseñó "porque la reforma de las titulaciones que pensábamos que se iba a plantear no era suficiente".

Por ello, el plan se diseñó pensando en los futuros planes de estudio y se centró en otenciar una preparación "más realista" y experimental de las disciplinas técnicas, mediante la participación continua de los alumnos en laboratorios abiertos o integrados y el establecimientos de convenios con empresas para la formación en alternancia de los estudiantes de los últimos años de carrera.

Los estudiantes también reciben una lección magistral y participan en seminarios, al tiempo que son evaluados continuamente pero con un sistema que elimina los exámenes, ya que se les plantea una serie e objetivos que deben alcanzar para superar la asignatura.

En total, hasta la fecha han participado 15.560 alumnos por asignatura. El pasado año 500 estudiantes realizaron alguno de los programas de cooperación educativa y formación en alternancia que la UPV tiene suscritos con empresas.

Miró explicó que el plan, financiado con 100 millones de pesetas al año por la Consejería de Educación y Ciencia de Valencia, ha puesto en marcha un total de 72 proyectos, aunque están pendientes de aprobarse 40 ás.

Estos proyectos afectan a 14 centros o facultades de la universidad, concretamente en 29 departamentos que imparten 168 asignaturas de las 820 que se enseñan en total en la UPV, aunque la aspiración del equipo rector es extender progresivamente el PIE a todos los departamentos.

Los objetivos que persigue el plan son mejorar la calidad docente, según explicó Miró, y sobre todo el rendimiento académico. "En tres años de vigencia hemos observado que se da una mayor participación del alumnado, yaque el nivel de los no presentados ha descendido prácticamente", indicó.