Según informó hoy la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil, durante los últimos ocho meses 40 agentes de ambos países han trabajado en la desarticulación de un grupo de narcotraficantes que introducía la droga desde Turquía.

Agentes de la Policía Nacional han detenido a cuatro personas como presuntas autoras de un delito contra la salud pública, entre las que figura el principal responsable, propietario de dos restaurantes en Barcelona.

En total se han intervenido 92 kilogramos de estupefaciente en Madrid y en la localidad de Argeles-Sur-Mer, la mayor aprehensión de heroína realizada en 2009.

El grupo de narcotraficantes estaba dirigido por un ciudadano con pasaporte sueco, de origen curdo-iraní, afincado en la provincia de Barcelona, donde regentaba dos establecimientos de hostelería.

Durante la investigación se comprobó que se relacionaba directamente con los proveedores de la droga en Turquía y que contaba con la colaboración de ciudadanos franceses, residentes en zonas próximas a la frontera española de La Junquera, para realizar labores de recepción, transporte y entrega de las partidas de heroína a los distribuidores que operaban en escalones inferiores.

Los investigadores averiguaron que el principal responsable de la organización contaba con la colaboración de dos subordinados, ambos de nacionalidad francesa, encargados de recoger y transportar el dinero, además de almacenar la droga en viviendas o locales habilitados para ocultar el estupefaciente, situados en territorio francés.

A mediados del pasado mes de junio los agentes españoles detectaron una inminente importación de droga desde Turquía. Se pudo determinar además que, siguiendo instrucciones del proveedor instalado en Turquía, el jefe del grupo había establecido contacto con un individuo, natural de Marruecos y residente en Málaga, que actuaba como intermediario con distribuidores españoles a pequeña escala y que, según todos los indicios, era el destinatario de parte de la droga.

GOLPE POLICIAL

Ante la proximidad del transporte de droga a España, agentes de la Udyco Central de la Comisaría General de Policía Judicial se pusieron en contacto con la Ocrtis (Office Central pour la Represión du Trafic Illicite des Stupéfiants) francesa, para incrementar las medidas de coordinación e intercambio de información frente al posible envío de la heroína.

Cerrados los detalles de la entrega, el jefe de la organización transmitió a sus dos colaboradores directos las instrucciones oportunas para llevar la droga desde su lugar de ocultación en el sur de Francia hasta Madrid.

El día acordado para el transporte, recogieron el estupefaciente a primera hora de la mañana e iniciaron el traslado en un vehículo todoterreno con dirección a Madrid. Ese mismo día, el responsable se trasladó por tren hasta la capital madrileña para supervisar que la droga se entregaba oportunamente.

A mediodía, a la altura del peaje instalado en el kilómetro 18 de la Radial 2, los agentes interceptaron el vehículo que trasportaba la droga. En su interior, en una maleta, hallaron treinta paquetes que contenían 15,6 kilogramos de heroína. El conductor del vehículo fue arrestado en ese momento.

Paralelamente fueron detenidos en Madrid el máximo responsable de la organización y su contacto en el momento en que ambos se reunieron tras la llegada del primero a la capital.

Tras arrestar al jefe del grupo y a su contacto en Madrid, los agentes registraron el vehículo conducido por el segundo y localizaron en su interior, entre otros efectos, una factura de alquiler de un hangar ubicado en la localidad francesa de Argeles-Sur-Mer.

Con esta información y con los datos que obraban en poder de los investigadores españoles, se comunicó de inmediato a la Policía Judicial de Perpignan la ubicación del almacén.

Los policías franceses registraron el local, hallando en su interior 76,5 kilogramos de heroína repartidos en paquetes de medio kilo. Además, los agentes galos habían localizado y detenido previamente en esa localidad a otro de los miembros de la organización.