LOS POLICIAS DESTINADOS N EL PAIS VASCO PIDEN MAS MEDIOS PARA COMBATIR EL TERRORISMO
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Más seguridad, mejores medios materiales y mayores medidas de protección, son las peticiones que realizarán los sindicatos de policía el próximo miércoles al secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, con quien mantendrán una reunión con el fin de mejorar las condiciones de vida de los agentes destinados en Euskadi y Navarra.
Durante el encuentro, también hablarán sobre las consecuencia del repliege de las fuerzas de seguridad en el País Vasco en favor del despliegue de la "Ertzaintza" (Policía Autónoma Vasca), según informaron hoy fuentes sindicales a Servimedia.
En opinión de algunos sindicatos policiales, los agentes deberían mantener competencias en materia de seguridad en el Norte, ya que un abandono rápido de sus misiones generaría un déficit en los servicios ofrecidos por la policía a los ciudadanos.
Los sindicatos expondrán la necesidad de disponer de más coches blindados, chalecosantibalas, tratamiento médico adecuado para aquellos funcionarios que sufran depresiones debido al denominado "síndrome del Norte" (una enfermedad no reconocida como tal por Interior) y el establecimiento de un dispositivo eficaz en torno a las dependencias policiales para abortar las acciones terroristas.
Según las mismas fuentes, estas reuniones con Rafael Vera, que son periódicas, tienen más un carácter informativo que efectivo, puesto que las medidas debatidas no son llevadas luego a la práctica.MAS Y MEJOR
La petición de mayor y mejor seguridad para los policías que trabajan en el País Vasco, coincide con el atentado perpetrado el pasado sábado en San Sebastián. Ese día, dos agentes de un coche patrulla salvaron su vida gracias al blindaje del vehículo oficial en el que viajaban.
La protección de los bloques de viviendas del Cuerpo Nacional de Policía en Euskadi y Navarra también será abordada en el encuentro, ya que el pasado mes de febrero los terroristas explotaron diez kilos de amoal en un inmueble de la localidad guipuzcoana de Pasajes, donde residen agentes.
Tres meses antes, los etarras pusieron en el mismo bloque otros diez kilos de amosal, que al estallar hirieron al hijo de un funcionario. A partir de entonces, los policías libres de servicio hicieron guardias para evitar que los terroristas colocasen artefactos explosivos o coches bombas en sus viviendas.
El Ministerio del Interior adoptó una serie de medidas de seguridad, nunca reveladas para no dar pistas, mientra que los sindicatos de policía afirmaron que nunca entraron en vigor.
(SERVIMEDIA)
29 Jul 1991
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