Los deteidos podrían estar implicados en la colocación, el pasado 17 de febrero, de dos artefactos de pequeña potencia en la cafetería Borgia, de Logroño.

A las diez de la noche de ese día, un artefacto hizo explosión en los lavabos del local. Poco después, los equipos de desactivación inutilizaron otra bomba-trampa que estaba adosada a la puerta de salida del establecimiento.

Ese mismo día se produjeron otras dos explosiones de artefactos incendiarios colocados en sucursales bancarias de Banesto e Ibercja en la capital riojana.

El dispositivo policial, que fue coordinado por el magistrado de la Audiencia Nacional Javier Gómez de Liaño, dio como resultado la detención de dos personas que se encontraban de vacaciones en Peñíscola, localidad próxima a Oropesa, donde veranea el presidente del Gobierno José María Aznar.

Otras dos personas fueron arrestadas por la policía en la localidad navarra de Viana, dos más en la capital riojana y una en Bilbao.

El Ministerio del Interior no había facilitao a primeras horas de la tarde la identidad de los detenidos y apuntó la posibilidad de que en las próximas horas alguno de ellos quedara en libertad.