Entre el material incautado hay cuatro inhibidores de frecuencia, ordenadores portátiles, maquinaria ydiversas herramientas, como taladros, radiales, hachas, mazas o cuerdas. Además los agentes han intervenido 2.000 euros y resguardos de envíos de dinero a su país por otros 40.000.

La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la UDYCO de Madrid, junto con la de la Costa del Sol y la Comandancia de la Guardia Civil de Guadalajara. El grupo era altamente cualificado, actuaba con gran profesionalidad y preparaba los golpes cuidadosamente.

La banda actuaba por todo el territorio nacional. Días antes de cometer el asalto, algún miembro del grupo se desplazaba al lugar elegido para estudiar su viabilidad. Después, repartían las tareas: unos se encargarían de la vigilancia exterior, que permitiría la huida del lugar si los sorprendían las Fuerzas de Seguridad; otros serían los responsables de la ejecución del robo.

A tal fin, estos delincuentes estaban continuamente comunicados entre sí, a través de equipos de transmisión. El grupo disponía de medios técnicos punteros, de hecho utilizaban inhibidores de frecuencia para evitar los sistemas de alarma de viviendas y empresas.

Las investigaciones policiales han puesto de manifiesto que los detenidos utilizaban documentación falsa para alquilar las viviendas y los vehículos; los cuales cambiaban con frecuencia para no ser identificados.

Para abrir las cajas fuertes utilizaban diferentes herramientas, como taladros, radiales, hachas o mazas. Además, disponían de tres escondites, alejados del núcleo urbano y poco transitados, donde guardaban los útiles necesarios para cometer sus delitos y algunos objetos robados.

Hasta el momento, se han esclarecido 20 robos, más de la mitad de ellos en Madrid, fundamentalmente en naves industriales. El resto de robos fue cometido en Málaga, Sevilla y Ciudad Real.