La person que ahora ha sido detenida fue la que dio el aviso a la policía de que había encontrado el cadáver del joven en el interior de la caseta donde habitualmente pernoctaba.

Aunque todos los indicios parecen apuntar a que José B.O. es el autor material de los hechos, la Jefatura Superior de Policía de Zaragoza no descarta la posibilidad de que pueda haber un segundo implicado.

Al cuerpo sin vida de José Manuel Alda se le practicó ayer la autopsia y el informe médico confirma que falleció al menos 24 oras antes de que fuera descubierto sobre un colchón ensangrentado en el inmueble del número 77 del Camino de de las Torres.

MUTILACIONES

Por lo que respecta a las heridas, fuentes policiales han confirmado la existencia de un corte muy profundo en el muslo, la amputación de un dedo de la mano derecha (que fue encontrado cerca del cuerpo) y de la oreja izquierda (que todavía no ha aparecido).

El joven presentaba también señales de estrangulamiento en el cuello y tenía un golpe en el lado derech de la cara que le destrozó el cráneo y parte de la cara. La presencia de restos de semen en el cuerpo indican la posibilidad de que se trate de un asesinato por motivos de carácter sexual, aunque no se descartan otros móviles.

José Manuel Alda Torralba es el segundo de una familia de seis hermanos. Sus padres están divorciados y su madre, que convive con un bilbilitano, tiene la custodia de los niños. El joven había estado internado en el colegio del Buen Pastor hasta finales de diciembre de 1993 pororden judicial. Sin embargo, la semana pasada fue localizado por la policía de Zaragoza y enviado al Centro de Orientación y Acogida de la Diputación General de Aragón.

La dirección del establecimiento entró en contacto con su familia para que fueran a recogerlo, pero ante la imposibilidad de que su madre se desplazara a Zaragoza funcionarios del Gobierno de Aragón lo llevaron a su domicilio en Calatayud. Antes de que éstos emprendieran el viaje de regreso a la capital aragonesa, José Manuel huyó de s casa y su madre denunció la fuga.