Los muebles fueron robados hace tres años por un matrimonio sueco, de origen polaco, en otros apartamentos de la Costa del Sol, con el ojetivo de decorar otros inmuebles, que posteriormente serían puestos en alquiler.

Parte de los enseres robados por el matrimonio fueron recuperados por la Policía, en un servicio practicado el pasado mes de octubre.

Los cuatro chalets registrados estaban alquilados a turistas extranjeros, que quedaron sorprendidos por la actuación policial ya que los inmuebles quedaron prácticamente vacíos.

Los inquilinos son absolutamente ajenos a la actividad delictiva resuelta, que será cerrada una vez se detenida una tercera ciudadana sueca, que se encuentra huída de España.